Mar, 02/11/2021 - 09:20

John Alexander Rodríguez, el rector que trabaja por la igualdad de oportunidades para la ruralidad de Suratá, Santander

John Alexander Rodríguez

Bajo la filosofía institucional ‘niños del sector rural en igualdad de oportunidades con los niños del sector urbano’, el Colegio Francisco San Juan y sus 10 sedes rurales, la que ellos llaman la Familia Cofrasán, que habita en buena parte del corregimiento de Turbay del municipio de Suratá, Santander, ajustó, desde el año 2018, su malla curricular que privilegia la investigación como estrategia pedagógica para transformar las condiciones actuales y devolver a los estudiantes de la región las oportunidades de estudio.

Quien lleva la batuta de esta transformación es el rector, John Alexander Rodríguez Gómez. Normalista de la Escuela Superior Francisco de Paula Santander de Málaga y licenciado en Educación con énfasis en Ciencias Naturales y Medio Ambiente de la Universidad Industrial de Santander.

Este santandereano, que además cuenta con un máster en Educación de la Universidad Autónoma de Bucaramanga señala, con una sonrisa en su rostro, que después de darse cuenta de que cada vez eran más los niños, niñas y jóvenes que cambiaban sus sueños de estudiar por ir a trabajar para ayudar con el sostenimiento de sus familias o, sencillamente porque empezaron a “perder el amor por estudio”, concluyó que su comunidad educativa necesitaba una mejor articulación entre la institución y el entorno, pues solo así era posible ofrecer alternativas que les motivaran a finalizar su trayectoria escolar

“Nuestra región vive en un vaivén entre el café, la yuca, el apio, la mora y el tomate por un lado y la violencia, el desplazamiento y la falta de oportunidades para los jóvenes, por el otro. Por eso, necesitábamos recuperar las oportunidades de estudio que las contiendas les arrebataron a nuestros niños, niñas y adolescentes”, añade Rodríguez.

Para lograrlo, la comunidad, con el liderazgo del rector, puso en marcha una serie de acciones orientadas a fortalecer el trabajo colaborativo entre docentes y estudiantes de cara a mejorar las condiciones para volver al colegio y permanecer en él.

El primer paso fue la consolidación del trabajo colaborativo con la planta docente, administrativa y directiva desde la lectura de familia Cofrasán, y el acompañamiento a la formación y actualización de todos los docentes. De acuerdo con John Alexander Rodríguez, fue en este aspecto, en el que la Institución Educativa recibió aportes pertinentes de la Escuela de Liderazgo para Directivos Docentes que, en sus palabras:

“Se centraron en empoderar la resignificación de la filosofía institucional desde el liderazgo directivo, pedagógico, comunitario, administrativo y financiero para, de esta forma, potenciar la construcción de redes y el mejoramiento continuo”, señala Rodríguez

Aporte personal, pedagógico, administrativo y comunitario

Según el directivo docente, el aporte de la Escuela de Liderazgo se ha visto reflejado en el mejoramiento de sus prácticas de liderazgo personal, permitiéndole recontextualizar el trabajo como directivo docente. Ahora, se acepta a sí mismo como sujeto transformador, lo que le permite reconocer en su quehacer pedagógico, su capacidad de liderar la resignificación del Proyecto Educativo Institucional (PEI) con un importante énfasis en el ajuste curricular flexible, pertinente y sobre todo, fruto de la construcción colectiva, de cara al feliz regreso a las aulas de clase.

“He potenciado la capacidad de escucha a cada integrante de la comunidad educativa desde sus nuevas miradas e interpretaciones como producto de la pandemia. Desde mi liderazgo comunitario, he potenciado el desarrollo de habilidades socio afectivas y socioemocionales que permiten recuperar la mirada de una escuela segura y comprometida”, apunta John Alexander.

Por ahora, el directivo, que participa en el Diplomado de Liderazgo Pedagógico Directivo en establecimientos educativos con la Universidad del Magdalena, adscrito a la Escuela de Liderazgo y hace parte del Nodo Santander del componente de Redes y comunidades de aprendizaje, está convencido de que con el apoyo de la Escuela, y sobre todo de su equipo de trabajo, continuará avanzando hacia el cumplimiento de los objetivos de su institución. En esta labor, el liderazgo colaborativo, reflexivo y transformador el encuentro entre pares y el intercambio de experiencias, tendrán la prioridad a la hora de tomar decisiones.